R.C.D. MALLORCA. EL EQUIPO Manzano: "Es un partido de fútbol, no un linchamiento" El entrenador pide a la afición que "apoye al equipo contra Osasuna y no pite al presidente Vicenç Grande"
SEBASTIÀ ADROVER. PALMA. Manzano sólo quiere pensar en fútbol. Por eso ayer recordó que el Mallorca afronta mañana la segunda jornada de Liga ante Osasuna y pidió a la afición que no abuchee al presidente Grande como el día de la presentación del equipo -14 de agosto-. "Es un partido de fútbol, no es un linchamiento ni una bronca", aseveró. El entrenador del Mallorca mostró su hartazgo a la hora de hablar sobre la situación que atraviesa el club. "Sea quién sea el dueño, la conclusión es que espero que sea lo mejor para el Mallorca", se limitó a decir con sinceridad. Pero el preparador, que dejó entrever que la prensa tiene algo de culpa en que se hable sobre la posibilidad de una pitada a Grande, dejó claro que a sus pupilos hay que apoyarles. "Vamos a aislarnos totalmente de esta situación si al final se produce, que me temo que así será porque aquí se está recordando que el presidente tiene que recibir una pitada. Si nos ponemos en esta situación, después de silbarle, aunque me gustaría que no lo hicieran, hay que aplaudir a los futbolistas y apoyar al equipo", afirmó. El jienense se extendió en sus explicaciones al respecto. Se nota que le molesta que se hable de ello. "La afición es soberana para hacer lo que quiera, pero si entiende que ése es el camino para manifestar su repulsa hacia el presidente, pues que sea así", aseguró. Eso sí, el entrenador comentó que el adversario tendrá ventaja si el mallorquinismo no mira al césped: "No me gustaría que Osasuna se encontrara un ambiente en el que la afición esté pendiente de otros temas que no sea el de animar al equipo". Y Manzano fue más allá en su explicación. "Hay que estar predispuesto a ver el primer partido de fútbol en casa. No hay que estar esperando un fallo para pitar. Que el rival no vea que el público está en contra de los suyos", señaló. El andaluz sacó pecho a la hora de hablar sobre los méritos de Grande para poner en duda los motivos de los hinchas para silbarle. "La gestión del presidente es bastante buena, los resultados lo dicen todo y habría que evaluarlo en su aspecto deportivo", apuntó. Discusión Acerca de la discusión que mantuvieron el pasado lunes el técnico y el dirigente sobre el mismo césped de Son Bibiloni, el ´jefe´ del banquillo quitó hierro al asunto. "Dentro de los gestos que aparecieron en algún medio, el fondo de la cuestión de la charla no tuvo ninguna trascendencia fuera de lo normal", dijo. De ahí que desmintiera cualquier conato de enfrentamiento entre ambos. "Sigo insistiendo en que mi relación con el presidente es buena, estuvimos hablando sobre la compra-venta del club, no hubo ningún rifirrafe, no hubo ninguna falta de respeto, ni insultos ni menosprecios de uno hacia el otro", concluyó. Texto tomado del periódico: "Diario de Mallorca".
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